Este martes pasado, 28 de diciembre, día en que originalmente se iba a realizar la votación del aborto en el Congreso el año pasado y pasó al 30, un grupo significativo de católicos pro vida celebró una Misa en conmemoración del día de los Santos Inocentes y para rezar por las 32.758 almas de los bebés asesinados en el viente materno este año.
El dato de muertes fue entregado por el Gobierno a un año de la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, en el cual se contabilizaron 32.758 abortos informados en el sistema público.
HONRAR Y LLORAR A NUESTRO MUERTOS
En un clima de recogimiento y emoción, el encuentro organizado por los grupos de oración acompañados por Mariana Rodríguez Varela, se inició a las 19 horas. Comenzó con un Rosario, le siguió la Misa y finalmente se cerró con una Adoración Eucarística que se prolongó espontáneamente por el clima de oración y cantos hasta las 10 de la noche en que se dio por finalizado.
La Misa fue oficiada por el sacerdote diocesano de la localidad de Baradero Lucas Martínez. En su homilía el padre hizo alusión a la víspera de un día triste en que se aprobó el aborto legal y el deseo de honrar y dar una especie de responso a todos esos niños que fueron asesinados legalmente porque la Patria se ha convertido en un Estado genocida.
El sacerdote recordó las palabras del ahora Papa Francisco en la Misa de la tragedia de Cromañón en la que hablaba de una sociedad argentina llena de soberbia, que maquilla las heridas, que hace sufrir y no llora a sus muertos. «Venimos acá porque no queremos que las noticias diarias vayan tapando las anteriores y camuflen lo que nos pasa. Y queremos llorar a nuestros muertos, a esos niñitos que han muerto de manera cruel.»
El Padre hizo también un llamado a ser cristianos de verdad y a ser firmes en la defensa de la vida y no movilizarse tanto por otras causas de la sociedad, como puede ser la contaminación, sino hacerlo por la más importante: proteger al más débil de todos. Y llamó a no perder la esperanza de que un día esta ley acabará y Cristo reinará en nuestro suelo.
Al cierre, el Padre Martínez grabó un mensaje de esperanza de fin de año para compartir por Faro Films