Cuando nos propusieron la nota de Yo Traidor, no lo dudamos no sólo por estar inspirada en ese gran pasaje bíblico del Hijo Pródigo, sino también por el elenco actoral de lujo que convocó. Grandes actores talentosos, potentes como Mariano Martínez, Osvaldo Santoro, Arturo Puig y Jorge Marrale, entre otros. Una película distinta, con un mensaje de valores profundos que no es tan común en el cine de hoy.
Ésta es la tercera película de este joven director, guionista y productor de cine, Rodrigo Fernández Engler. Sus dos primeros títulos fueron: Soldado Argentino sólo Conocido por Dios y Cartas a Malvinas, lo que delata su devoción por este tema. Pero Yo, Traidor no es una cinta sobre la guerra, por el contrario es una película que Fernández define como personal e íntima, inspirada en el Hijo Pródigo La trama se sitúa principalmente en la Patagonia, un lugar que no fue escogido al azar, con una fotografía envolvente. Otra apuesta son los personajes que te llevan a descubrir nuevas facetas actorales de estos reconocidos artistas. Una película con enseñanzas que merece que vayamos al cine.
¿Por qué el Hijo Pródigo?
Porque es una historia de todos nosotros, así la titulamos. Es una versión contemporánea libre e inspirada en la parábola del Hijo Pródigo, esta historia universal tan conocida. Este padre que tiene dos hijos entre los que reparte su herencia y uno malgasta el dinero. Es la historia de amor entre un padre y su hijo y en nuestra versión también es un drama, un thriller.
¿En qué radica esto de hacer películas relacionadas con el tema de la fe?
Como soy cristiano y persona de fe intentamos transmitir esos valores a través del cine, pero quiero aclarar que ésta no es una película religiosa de ninguna manera, pero sí tiene valores y principios en los que uno cree. Es un película para todos los públicos.
¿Cuál es el mensaje que querés dar?
Es una película acerca de las segundas oportunidades, de redención, del perdón, del reencuentro. Todos los seres humanos venimos a esta vida con un propósito con una misión que cumplir y muchas veces nos alejamos de este propósito y luego volvemos en sí y recuperamos el camino. Como es una obra de arte cada uno le dará interpretaciones distintas. Habrá algunos que percibirán que está basada en el Hijo Pródigo, otros verán un thriller, pero todos van a coincidir en que hay un mensaje de valores profundos detrás.
¿Cómo lograste juntar tantas figuras en tu elenco?
Con el director de casting pensamos en el elenco, soñamos con este elenco. Pero nos dijimos: alguno se nos va caer, no va poder, por cachet o algo y no fue así. Todos aceptaron, ninguno puso objeciones. Y siempre aclaro que no convencimos a ninguno con la billetera. Se comprometieron del momento cero. Fue muy fácil, muy placentero trabajar con ellos, fue una experiencia muy linda sobretodo para un director joven como yo, tener a este puñado de estrellas, grandes actores y muy buenas personas. Fue un muy buen aprendizaje.
¿Por qué elegiste filmar en la Patagonia?
Es un lugar que me gusta mucho, y cuando hicimos el guión con Mario Pedernera lo situamos ahí, en el mundo de la Pesca que me interesaba investigar. Y basándonos en la Parábola, en la que el hijo se va a una tierra lejana, la Patagonia daba esa sensación de estar en un lugar alejado. La película es un viaje espiritual, geográfico, es un viaje amplio en todo el sentido de la palabra.
¿Cuánto tiempo te llevó hacerla con el tema de la pandemia?
Se filmó entre agosto y octubre del 2019, antes de la pandemia. Se filmó en Córdoba, en Puerto Rawson en la Patagonia y en Tulsa, Oklahoma , Estados Unidos. En septiembre en medio de la película nació mi segundo hijo Benjamín lo que fue una experiencia muy movilizante. La terminamos en noviembre del 2020 y decidimos guardarla ya que no había cine por la pandemia. Podíamos haberla lanzado por la plataforma de streaming Cine.ar del INCAA, pero concebimos la película para el cine y decidimos guardarla y estrenarla en las salas.
Ahora que se abrieron los cines, ¿cómo compite el cine de valores con el cine de los super héroes como Marvel?
No se compite. Nadie puede competir contra la Araña. A pesar de lo que estamos viviendo hace 20 días se batió records de gente en el cine y el 95 por ciento fue a ver El Hombre Araña. Lo que nos queda es tratar de alejarnos, es una cuestión de inteligencia o de sentido común. Es muy difícil competir contra estas corporaciones. Para los dueños de los cines, que son los exhibidores, si no cortas tickets te vuelan. Son empresas que hacen su negocio. No les interesa si la película tiene o no valores, si corta ticket la dejan, por eso es importante que la gente vaya la primera semana de estreno.
¿Creés que con lo que estamos viviendo, la sociedad está demandando películas de valores?
Yo creo que sí, nosotros hacemos este tipo de películas por estas razones. Nosotros venimos haciendo funciones privadas para la prensa especializada, y otros grupos cercanos y tuvo muy buena recepción. Esperamos que la gente vaya al cine a verla.
Faro Films